Constantemente pienso sobre la cuestión de que ya no queda nada por inventar. No porque quiera dar un paso mas allá del resto del vulgo y aparecer con algo totalmente novedoso; sino simplemente por el hecho del asombro que me causa como el pensamiento humano parece seguir una ruta de evolución pautada. Y no me remito a los hallazgos contemporáneos, en donde la comunicación acorta las distancias entre meridianos. Miles de años atrás, diversas culturas forjaron artes muy similares separadas por mares y océanos, sin tener conciencia una de la otra. Uno podría llegar a pensar que, ontologicamente, hay una continuidad en el pensamiento humano, acumulando conocimiento capa tras capa, generación tras generación.
La gente del siglo XXI tiene menos margen de invención que la del siglo XVIII y no concibo la idea de que nos hayamos vuelto más inteligentes con cada camada, por lo que el desafío de idear cualquiera de las teorías que conforman ese estrato de pensamiento acumulado sigue siendo tan complicado como fue la primera vez.
Como siempre, no pienso ahondar en el tema porque a esto no era a lo que iba con este post. Conozco gente que sin leer un libro en su vida sobre determinado tema, logra esbozar una idea muy similar a la que a algún sabio del pasado le sirvió para inmortalizarse. Al fin y al cabo, toda la paja mental que es la filosofía no es otra cosa que la interpretación del alma y sus manifestaciones.
Pero esa persona de nuestros tiempos que, en un periodo de introspección, da con una idea sobre un tema tratado anteriormente sin su conocimiento: aprende el tema por el legado de la cultura que implícitamente y de manera que desconocemos forma parte de su conocimiento "de fabrica"? La formalización no viene al caso, no limito estas construcciones mentales simplemente a aquello que esta estructurado según los cánones de las instituciones del saber formal. El lenguaje de las ciencias formales no es accesible a toda la población y explicar ciertas cosas desde el lenguaje común es una de las principales causas de la vaguedad de esos enunciados.
Entonces, en comparación, aquel ilustrado que tuvo contacto con numerosos libros, en los cuales encontró el alimento para su intelecto y las herramientas para estructurar su pensamiento; es acaso mas evolucionado que la persona que sin contacto con las teorías dibuja con un trazo tímido y escueto alguna genialidad de otro siglo?
Quizás todo se reduzca a las potencialidades, pero en ese caso, yo con genes y destino no me meto.
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