Garúa un día de oscuridad,
como chispas de pureza dirigiéndose hasta el suelo
junto al fresco del arroyuelo
donde antaño, se ahogó el bautizado.
Desnudo, frente a un sol glacial,
respirando la vida como si fuesen llamas,
Me pensaba único
pero solo era una ficción.
Y esto lo escuché del viento
y lo vi en el firmamento.
Y en mis pensamientos,
creí que era el fin del mundo.
Creí que era el cuatro de Julio.
Empalideciendo en la luz fulgurante,
la luz temida resquiebra y mengua
trayendo a los abrazados hasta aquí.
Y en cualquier lado, a ningún alma le importará
que el fuego se este dispersando,
y ninguna boca querrá hablar de ello.
Mientras tanto, en el fondo de un foso
Jesús trata de fingir una sonrisa
debajo de una nueva lluvia de tierra.
Y esto lo escuché del viento
y lo vi en el firmamento.
Y en mis pensamientos,
creí que era el fin del mundo.
Creí que era el cuatro de Julio.
Y ahora tengo el control,
ahora, que me he caído fuera,
Ayer dormido, hoy de pie
y todavía recordando
tu completa dulzura.
Enciende una bengala
y sostenla en tus manos.
Y esto lo escuché del viento
y lo vi en el firmamento.
Y en mis pensamientos,
creí que era el fin del mundo.
Creí que era el cuatro de Julio.
lunes, julio 04, 2011
Fechas Patrias
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