No sé que deseaba mas... si un adiós definitivo o un hasta luego. No sé bien que quería, o si sabía pero era mas que obvio que no podía ser. Era una de esas situaciones que uno evita toda su vida porque sabe que no tiene la menor idea de como reaccionar. Ya no sabía a quien escuchar, si a mi, a mi otro yo o a ella... Ya nada era seguro ni se podía proyectar al futuro. Era una maraña de sentimientos entremezclados.
Realmente no tenía idea de como había llegado ahí. Pero ya estaba en curso y no podía retractarme, no después de haber tomado conciencia... No podía vendarme los ojos de nuevo. Parte de la verdad se me había sido develada y ya no podía ignorarla, no tenía ganas de ignorarla.
Dije lo que dije sin pensarlo, y no me arrepiento de esas palabras, porque pensarlas las hubieran rebajado. Lo que lamento es haberme explicado, o por lo menos tratado de explicarme, porque sé que lo deje a hablar a él, quien esta mas dolido que yo.
No sé que hacer... No sé que hice... Ahí reside mi sabiduría. Solo sé que no sé nada. Pero siento...
Silla!
No hay comentarios.:
Publicar un comentario